sábado, 18 de agosto de 2012

El wall street de mi peso

Entre otras aficiones y manías debo reconocer que soy bastante geek. Me gustan los aparatitos y se me dan relativamente bien las nuevas tecnologías... por eso me gusta probar todo lo que puede ayudarme de una u otra forma en mi tarea actual de perder peso. Como dije en la primera entrada de este blog creo que llegué al límite de mis fuerzas físicas cuando arrastraba unos 145 kg de mí mismo, ahí, como dicen por mi pueblo, puse pie en pared. Desde hace un año más o menos voy controlando mi peso con una aplicación para el iphone que se llama MetaPeso. No es que haga maravillas pero a mí me sirve para ver mi progresión y me parecen muy útiles los gráficos que te saca que pueden ser depende del momento esperanzadores o frustrantes. En este que reproduzco aquí se ve batalla del último año:


Como puede verse mi línea de peso ha estado desde septiembre del año pasado en torno a ciento treinta y algo. En febrero o marzo fuí al médico de cabecera porque tenía un dolor intenso en las rodillas y me echó un sermón súperconvincente sobre la posibilidad de tener diabetes con cuarenta años y de morirme con cincuentaytantos, no ver crecer a mi hija... vamos, un drama. El caso es que como puede verse en el siguiente gráfico no me fue tan mal.


















Los meses de mayo y junio fueron estupendos. Sobre todo porque después de una mudanza y todo el stress que genera me puse a hacer ejercicio por las mañanas. Ahora trabajo por la tarde con lo cual tenía bastante tiempo para ir al gimnasio y luego hacer la comida hasta que me iba a las 13,30 aproximadamente al trabajo. ¿Qué ocurrió entonces? Ocurrió mi segunda hija y el verano. No es que tenga la culpa de nada la pobre pero se acabó el gimnasio y lo único que puedo hacer es salir un rato con la mayor en el carro y llevarla a un parque que esté lo más lejitos posible. La verdad es que podía ser peor. Cuando me desfasé me desfasé a lo grande y me he comido las tarrinas de helado del mercadona mano a mano con mi mujer en dos noches. De 127,5 que fue mi mayor logro, pasé a los 129,5 en los que he empezado esta aventura y la verdad es que en una semana me he podido quedar más o menos como estaba. 
Si os digo la verdad lo que se me apetece ahora y haré en cuanto pueda es andar. Tengo ganas de tener un poco de tiempo libre y darme largos paseos sobre cuyos beneficios para la salud estoy leyendo mucho y que comentaré otro día...



1 comentario:

  1. Me encantan los gráficos, te ha quedado super geek... me pasa como a ti, me flipan todos los aparetejos, viviría rodeado de ellos...

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