¿Ahora qué?, ¿Eh, Murakami? ¿Ahora qué?... |
De todas formas no ha sido fácil. Como sabéis soy propenso a equiparme más que un piloto de carreras antes de hacer cualquier esfuerzo físico. Es algo superior a mí lo que me gustan los cacharritos y los gadgets. Así que iba que parecía robocop. El pulsómetro, la cinta pectoral para las pulsaciones (eso no se ve), el brazalete para llevar el móvil, los cascos... hay que encender tantos cacharros antes de salir que casi estaba cansado cuando salí a la calle. Eso sí, como un pincel. Lástima que se me olvidó un detalle. Quitarme las gafas. No es buena idea correr con las gafas de pasta, es un horror, se resbalan con el sudor y parece que está uno haciendo un sketch en una película de Woody Allen (con el doble de kilos y menos de la mitad de talento que él, claro). Así que ir tan preparado no me ha servido de mucho ya que casi todo el camino he ido con las gafas en la mano. Y claro, cuando ves un corredor con todos sus detalles, pero con las gafas de ver en la mano te dices: "este tío es la primera vez que sale a correr en su vida". Y así ha sido.
Luego me he pesado y muy bien. Pero eso ya es otra historia. Lo de correr ahora mismo es muuuucho más importante para mí.
Bravísimo por ti que te has animado a dar el primer paso!!!
ResponderEliminarYo diría que no te aflijas por todo lo que la gente pueda pensar de ti, te apuesto que ni la cuarta parte de los corredores se fijan en uno.
Disfruta las agujetas que vendrán que eso también es buen síntoma! ;)
Ja, ja, ja, trote cochinero...y cómo nos lo describes, exagerado! . Bien por ti, pero yo cada vez me siento más alejada de intentarlo, no sé si me has ayudado :)
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