Que alguien se lo coma ¡ya! |
Mi mujer dice que ella tuvo que ver cómo me comía yo unos macrobocatas mientras ella estaba a dieta (yo no me acuerdo de eso). El caso es que me está costando más de la cuenta no caer en todas las tentaciones. Estoy resistiendo a medias. El fin de semana me he pasado como siempre. Me he pesado esta mañana y... como siempre también. Voy a ver si durante la semana hago un pequeño esfuerzo y lo supero. Mañana tengo que viajar por trabajo a un sitio con mucha fama de buena comida. Voy a tratar de salir a comer solo y de comerme mi tapa huérfana. Las cenas las haré lo más ligeras que pueda y a ver si por lo menos bajo de los ciento veinte kilos y puedo darme el alegrón de haber superado una meta volante importantísima para mí. Por lo que os leo creo que todos estamos pasando más o menos un bache. Debe ser cosa de las mareas, o una conjunción de planetas o... qué leches, que tenemos un hambre canina.
Canina es poco!!! Ansia viva es lo que tengo yo!!! Tenemos que ser fuertes por nuestro propio bien asique animo y a versi conseguimos no atracar las despensas, que yo con eso de los nervios me dejan comprarme lo qie no debo y hasta que no le veo el fin no paro!!
ResponderEliminarUn besazo y suerte!!
Estamos apañaos!! yo estoy con un resfriado de tres pares de huevos...por si no tenía suficiente ya.
ResponderEliminarSi es que lo del circo y los enanos es más cierto que el ansia viva de Olaya.
Saludos colega
Lo del resfriado es porque te han quedado las defensas bajas con el estrés que estás pasando.
EliminarPobrete, ya verás como todo pasará (palmaditas en la espalda y tal)
:-)))
Qué razón tienes...tener la tentación en casa, eso es lo peor, pero si se supera esa prueba se puede con todo! Ánimo!
ResponderEliminarYo lo meto todo en el congelador, hasta los donetes y las chuches. Así no me los puedo comer (bueno, los donetes congelados están cojonudos, descubrimiento reciente, ja ja ja).
ResponderEliminarYa sé que hay cosas que no se congelan, pero oye, al que no le guste, que no deje restos por ahí, que luego pasa lo que pasa...
Cuánta razón. No hace falta decir nada más.
ResponderEliminar